chambre noir: Paolo Raeli

by - sábado, diciembre 10, 2016



 Me gustan sus fotografías, pero no sabía su nombre hasta recientemente. Simplemente había visto algunas circulando por internet, y cuando encontré la galería fue pensar "ahora todo encaja mejor".

Me gustan sus fotografías porque es el concepto de adolescencia que siempre he idealizado, quizás añorado. Es lo que busco y lo que encuentro muchas veces entre la náusea y la noche: el neón.
Esos momentos de inmortalidad, de saborear la juventud que pasa ante nosotros, es todo lo que tenemos de la vida ahora, todo lo que conocemos de su riqueza.

Puede que en unos años me vea reflejada en ellas, puede que prevalezcan como imágenes de algo que me hubiese gustado tener a los catorce, dieciséis, diecinueve. Ser millones de chicas y chicos distintos, cada uno pasándolo bien en una parte del mundo. Sentirme un poco ajena, un poco egoísta respecto al magnífico desastre de la humanidad, durante un rato. Y brillar.














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4 comentarios

  1. A mí también me encanta Paolo Raeli y lo encontré gracias a tumblr y al buscador de imágenes de Google. Sus fotografías (y lo que representa) es lo que he estado buscando siempre o lo que me hubiese gustado vivir en mi juventud, además de que las fotografías son exquisitas en todos los sentidos (también me hubiese gustado un montón hacerlas a mí).

    Un abrazo.

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  2. Pues muchísimas gracias por el descubrimiento porque sí que es verdad que transmite, transmite libertad y salvajismo, una liberrad cruda a la que nadie le ha echado la mano, algo precioso.

    Un abrazo,
    S.

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  3. Gracias por descubrirnos a Paolo, me encantan las fotos que has puesto, Marion. Y me leo entre tus palabras.

    Pero, por cierto, tú brillas mucho.

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  4. Me han gustado muchísimo sus fotografías, comparto contigo que representan ese algo de la adolescencia que solo se ve en películas y series como Skins: el detalle, los colores, los sentidos, la esponteidad, la inmortalidad tan mortal... Tan delicado y al mismo tiempo tan intenso, fuerte, rebelde.
    Sigue trayéndonos cosillas así.
    (abrazos eléctricos.)

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